Corrupción Radical: ¡ otra vez sopa !

Hace tiempo y allá lejos...escribíamos que "había nubarrones de corrupción y descontrol en la gestión"; pocos creyeron nuestra afirmación, otros nos miraron con sorna: es peroncho quién lo dice...no le den bola. Y asi siguió la historia de nuestro querido pueblo serrano. Pero al final la verdad, que es la única realidad se impone con la crueldad de los hechos. Hoy nuevamente nos desayunamos con este peripatetico caso de Desarrollo Social y el Trabajador Social que se quedería con los dinerillos de los indigentes( ¿indigente?).
Pero vayamos por parte, aunque nuestra frágil memoria nos falla, hay muchos vecinos que recuerdan, y recuerdan con datos muy precisos la saga del personaje de nuestra historia (por hoy, historia, tal vez mañana, una causa penal). Resumamos esta pequeña e interesante relato de pobres y "empleados acomodados" de cuño radical en Desarrollo Social: cuenta la leyenda que en épocas de nuestro inefable intendente por tres, Don Julio Zanatelli, había un estudiante de trabajo social que en la zona de la piedra muerta( y revivida en formato fierro y resina por la administración lunghista y con platita del innombrable pingûino, a la sazón presidente) hacia de las suyas quedandose con los subsidios(en plata contante y sonante) de los indigentes que solicitaban ayuda del Estado Municipal. Sus andanzas terminaron cuando denuncias por medio-no en los medios-el lord mayor lo fulminó de sus funciones y fue despedido de su trabajo.
Nuestro personaje, fiel exponente de las novelas de aventuras, no se dió por vencido y se arrimó
al nuevo gobierno-que elecciones mediante- se hizo cargo del Palacio Municipal.
Estos nuevos inquilinos no eran como el "viejo" Zanatelli; su estilo era más sutil y cruel para el manejo de los recursos humanos de la Comuna. Nuestro Zanatelli tenía berretines y fobias; cuando se brotaba con alguna situación de la casa, tomaba el camino más corto: desplazaba o echaba algún empleado peroncho y de esa manera dejaba contento a tirios y troyanos del primer piso y planta baja del palacio. Total en La Plata siempre había algún compañero que haciendo gala de principista-es decir, aplicando el apotegma peronista que la vieja guardia tandilense reformuló: "para un peronista no nada hay peor que otro peronista"- le abrían la canilla y lo incorporaban a sus planes políticos.
Pero el escenario cambio de decorado-no de fondo- y ahora estaban los viejos unionistas del radicalismo alquilando la Casa de los tandilenses. Esta situación que lleva casi seis años todavia no la entienden o no quieren entenderla algunos dinosarios de la política tandilense.
Pero vayamos al punto: el lunghismo acorazó con una superestructura el sistema administrativo de la municipalidad; creo cientos de puestos de laburo que se superpusieron al organigrama municipal y cerraron casi todas las ventanas y/o endijas por donde se les pudieran filtrar los desmanejos de recursos que esta gestión recibió de manera creciente desde su asunción. Pensemos que comenzaron con un presupuesto de menos de cuarenta millones y hoy andan en más de 130 millones-gracias a la evolución explosiva del crecimiento económico de la Argentina hasta fines de 2007- que han dilapidado alegremente sin haber proyectado un Estado Municipal que pueda afrontar los desafios enormes que nos plantea este siglo XXI.
En ese marco, nuestro personaje termina su carrera de trabajador social y lo ubican en el mismo área de donde el anterior gobierno lo había expulsado por quedarse con parte de los subsidios de los pobres tandilenses.
Y como el cuento con moraleja del Escorpión y la garza, no pudo con su naturaleza y volvió a las andadas...Asi estamos hoy, nuevamente ante un escandalito-no tiene la dimensión del famoso Secretario de Hacienda que no vió nada cuando el Tesorero se embolsaba el dinero de los contribuyentes-que marca el rumbo que va tomando la parte final del lunghinato antes de la entrega del poder en 2011.
Será la inteligencia de los vecinos no repetir la experiencia de está gestión y la capacidad de su clase política de generar una alternativa que puede realmente proyectar una ciudad para afrontar los desafiós del milenio. ¡ Que Dios nos tenga presente ! Amén.