En la provincia de Buenos Aires, este año, se inscribieron 138.600 alumnos más que durante el 2009. El crecimiento surgió a partir de la aplicación del plan de asignación universal por hijo y la escuela secundaria fue el nivel que más nuevos inscriptos recibió durante el 2010 (más de 50.000 chicos). Lo confirmó a un portal de noticias de un diario nacional, Mario Oporto.
Según afirmó el director general de Cultura y Educación bonaerense: "La asignación universal por hijo está siendo fundamental para incluir y retener al chico en la escuela. Ahora, nosotros tenemos la tarea de mejorar la calidad educativa”.
Además del crecimiento en la matricula escolar, los colegios de la provincia de Buenos Aires volvieron a recibir otros 160.000 chicos que habían dejado la escuela durante el 2009, por repetir o tener problemas económicos o sociales, regresarán a las aulas bonaerenses.
"En total son 300.000 más los chicos que este año se incorporaron al sistema educativo bonaerense", comentó el director del área educativa provincial. Esta cifra representa el 8,5 por ciento del total de la matrícula (3,5 millones) de alumnos que asisten a establecimientos educativos públicos en la provincia.
Oporto aseguró que hasta ahora la provincia ha podido responder la demanda educativa. "Hemos aguantado bien este crecimiento de la matrícula. Para evitar la superpoblación en las aulas se desdoblaron muchos grados. Antes con 30 alumnos ya se creaba otro grado. Ahora tuvimos que esperar a tener más de 40 chicos para desdoblar el curso", comentó el funcionario.
El primer cordón del conurbano. Las principales escuelas que incrementaron la matrícula fueron los establecimientos educativos situados en el primer cordón del conurbano bonaerense. Especialmente en los distritos de La Matanza, Lomas de Zamora, Merlo, José C Paz y Morón.
"La primaria sumó 25.000 nuevos alumnos y está al límite de su capacidad. La secundaria aún tiene vacantes, pero en muchas zonas del conurbano la matrícula se quintuplicó", comentó Oporto. Y precisó que en la secundaria el problema estuvo focalizado en la matrícula de 4° año. "Se tuvieron que crear nuevas divisiones para poder incorporar a los nuevos adolescentes".
El funcionario aseguró que para el próximo año hay "una proyección de futuros nuevos inscriptos de más de 100.000 chicos que serán incorporados al sistema educativo".
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