Aprendí”, dice muy seguro Fancisco de Narváez en uno de los más repetidos spots publicitarios de campaña. Pero parece que el mensaje no ha llegado al electorado, y por estas horas, el rumor de una posible declinación de su candidatura es cada vez más fuerte.
Los rumores, que surgieron ayer miércoles y se intensificaron este jueves, hablan de una decepción muy grande en las huestes del Colorado ante la aparición de una encuesta de Poliarquía, que lo muestran 36 puntos por debajo del gobernador Scioli en intención de voto.
Ni siquiera la figura de Rodríguez Saá parece traccionarle sufragios a De Narváez. Es más. Muchos hablan que, tantas idas y vueltas con las alianzas electorales, le harían hasta perder votos en la segunda vuelta.
En el interior bonaerense no son pocos los que opinan que lo mejor sería “bajarse” de la contienda. Temen que una cachetada mayor que en las primarias termine por sepultar varias carreras políticas. Y no son pocos los que recelan de la poca libertad que tuvieron a la hora del armado de listas.
Como se ve, siga o no en carrera, lejos quedó Francisco de Narváez de aquellas alegría de las legislativas 2009, cuando en alianza con Felipe Solá y Mauricio Macri, logró vencer en la provincia de Buenos Aires nada menos que al ex presidente Néstor Kirchner. Dos años después, aquel rédito electoral se hizo trizas, y el “Colorado” quedó besando la lona.
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